Entre los principios que debe seguir nuestro sistema educativo, se encuentran el dar una respuesta flexible adecuada a la diversidad de aptitudes, necesidades, intereses del alumnado, además de una forma combinada con la calidad de la educación dada, independientemente de sus condiciones y circunstancias.
Las Administraciones tienen el papel de ofrecer y arbitrar medidas necesarias para la consecución de ese objetivo, no solo dentro de los centros educativos sino también fuera de ellos. Es por eso que existen unas becas complementarias que permiten seguir programas y proyectos de enriquecimiento, que les permitan trabajar ciertos contenidos en mayor profundidad, resaltando sus talentos o capacidades altas en cuanto a sus intereses así como abordar aquellas cuestiones en las que pueden ocasionarles alguna/s dificultades. Por ejemplo desarrollo de creatividad, inteligencia emocional, entre otros…
En nuestro centro disponemos de programas elaborados integradores, que pretenden enseñar desde edades cronológicamente diferentes, ayudando a mejorar su inteligencia no solo cognitiva o la comúnmente conocida como académica sino también su inteligencia emocional, evaluando de forma objetiva los logros. Se pretende estimular las habilidades más determinantes para cada edad, de forma que les permita y posibilite un progreso profundo.